¿A qué sabe el amor de mamá?

Escrito por Itzel Cruz | Categoría: Gastronomía

Reconocido chef Carlos Gaytán con su madre

Dicen que el amor entra por el estómago, pero quienes han probado un platillo hecho por su madre saben que hay algo más profundo: un ingrediente invisible que reconforta el alma. ¿A qué sabe el amor de mamá? A sopa caliente en días lluviosos, a tortillas recién hechas al volver de la escuela, a recetas improvisadas que siempre salen bien, a esos sabores que no se aprenden en ninguna escuela de cocina, pero que se quedan grabados en la memoria.

Antes de decir nuestras primeras palabras, ya conocíamos el sabor del cariño. Desde la leche materna hasta las papillas caseras, mamá fue la primera chef de nuestras vidas. Con sus manos moldeó no solo nuestros alimentos, sino también nuestro paladar, nuestras costumbres y nuestros recuerdos.

En cada comida nos enseñó, sin palabras, a compartir, a agradecer y a cuidar. La cocina era su territorio sagrado, pero también su forma de darnos todo lo que podía.

 

Mamás que inspiran cocineros

Detrás de muchos cocineros y chefs, hay una mamá que encendió la chispa. A veces fue enseñándoles a preparar su primer arroz, otras, dejándolos experimentar en la cocina sin miedo al desastre. Lo importante no era que quedara perfecto, sino que lo hicieran con pasión.

Incluso hoy, muchos cocineros reconocen que su inspiración no vino de un recetario, sino de mirar a su madre cocinar sin esperar nada a cambio:

 “Si vas a cocinar, hazlo con amor”, “lava todo antes de empezar”, “prueba antes de servir”, “ponle tu sazón”... Consejos sencillos, pero llenos de sabiduría. Mamá no solo enseñaba recetas, enseñaba valores: paciencia, generosidad, dedicación. Y sin darse cuenta, muchas veces sembró la semilla de futuras vocaciones.

 

Chefs mexicanos que fueron inspirados por su madre

A lo largo del país, chefs exitosos han compartido que fue la cocina de su mamá la que despertó su amor por los sabores y los ingredientes, y que su carrera comenzó, sin saberlo, en casa. Aquí algunos ejemplos:

  1. Carlos Gaytán

Reconocido por ser el primer chef mexicano en obtener una estrella Michelin (Mexique, Chicago).
Creció en Huitzuco, Guerrero, donde su madre cocinaba platillos tradicionales con ingredientes frescos del mercado. Desde niño la ayudaba en la cocina, y esa conexión emocional con la comida de su mamá lo impulsó a seguir el camino culinario.

  1. Elena Reygadas

Reconocida por: Ser nombrada la Mejor Chef Femenina del Mundo 2023 por The World’s 50 Best Restaurants. Es chef de Rosetta, en la Ciudad de México.

Ha compartido que su interés por la cocina nació observando a su madre y abuela cocinar con respeto y amor por los ingredientes naturales. Su cocina es una extensión de esa enseñanza silenciosa.

  1. Zahie Téllez

Reconocida por su presencia en televisión y como promotora de la cocina mexicana contemporánea.
 

Su madre, de raíces libanesas, le transmitió desde pequeña la pasión por cocinar con identidad. En su cocina mezcla las tradiciones mexicanas y mediterráneas que aprendió en casa.

 

El amor de mamá no siempre se mide con abrazos o palabras: a veces se sirve caliente, en forma de caldo, de arroz, de pan recién horneado. En la cocina, nuestras madres nos dieron mucho más que comida: nos dieron tiempo, paciencia, ejemplo y cariño. Y aunque el mundo cambie y las recetas evolucionen, hay algo que permanece igual: el amor que mamá nos enseñó a través del sabor. Un amor que, sin importar los años, siempre sabrá a hogar.